En Cuba el Estado regula, financia y presta los servicios de salud. Estos
servicios operan bajo el principio de que la salud es un derecho social
inalienable, lo que define al sistema de salud cubano como un
verdadero Sistema Nacional de Salud (SNS). (12)
El Ministerio de Salud Pública (MINSAP) es el organismo rector del
Sistema Nacional de Salud (SNS) y, por lo tanto, el encargado de
dirigir, ejecutar y controlar la aplicación de las políticas del Estado y
del Gobierno en materia de salud pública, desarrollo de las ciencias
médicas e industria médico-farmacéutica. (12)
Los principios rectores del sistema de salud cubano son los siguientes:
carácter estatal y social de la medicina; accesibilidad y gratuidad de los
servicios; orientación profiláctica; aplicación adecuada de los
adelantos de la ciencia y la técnica; participación de la comunidad e
intersectorialidad; colaboración internacional, centralización
normativa y descentralización ejecutiva. (12)
La prestación se enfoca en la Atención Primaria de Salud (APS) basada
en el modelo del Médico y la Enfermera de la Familia (MEF). Para
desarrollar este enfoque se tomaron en cuenta tres elementos: la
tendencia a la superespecialización de la práctica médica, los cambios
en el patrón de morbimortalidad con incremento de las enfermedades
crónicas no transmisibles y la necesidad de promover estilos de vida
más sanos en la población. El modelo del MEF garantiza una mayor
accesibilidad a los servicios de APS y tiene como objetivo general
mejorar el estado de salud de la población. Para alcanzar este objetivo
aplica un enfoque integral que va desde la promoción hasta la
rehabilitación, utilizando como instrumento esencial el análisis de las
situaciones de salud. Este análisis demanda la integridad, siendo
imprescindible la participación comunitaria e intersectorial. (12)
Más de 30 mil médicos de la familia trabajan en consultorios,
policlínicos y hospitales rurales que componen el nivel primario de
atención. En general, un consultorio de (MEF) sirve a 600-700
habitantes y en determinados centros de trabajo o estudio. Entre 15 y
20 consultorios componen un Grupo Básico de Trabajo (GBT). En
estos, además del médico y la enfermera de la familia, participan
especialistas en medicina interna, pediatría, ginecología y obstetricia,
un psicólogo, un estomatólogo, una supervisora de enfermería, una
trabajadora social, un estadístico y un técnico en higiene y